jueves, 4 de enero de 2007

Entrevista a Patricia Jablonka

IncuBA articula acciones con el Centro Metropolitano de Diseño (CMD) y depende de la Dirección General de Industrias Creativas del Ministerio de Desarrollo Económico del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En la práctica se la presenta como una incubadora de empresas que ofrece sistemas de capacitación, entrenamiento, formulación, evaluación y seguimiento de los planes de negocios.

La Red de Escuelas entrevistó a Patricia Jablonka, Coordinadora de IncuBA, con la intencionalidad de conocer la propuesta y compartirla con la comunidad educativa.

¿Nos podrías comentar cómo surge IncuBA, a qué se dedica y cómo funciona?

El programa se propone estimular el surgimiento de las empresas en la Ciudad de Buenos Aires. Surge en el 2001, recordemos que eran momentos de crisis en el país, y en este sentido se lo concibe como una manera de ayudar a las PYMES vinculadas con el área de diseño. Es por eso que estamos dentro del Centro Metropolitano de Diseño (CDM) y, en el contexto de la actual gestión, dentro de lo que es la propuesta para las Industrias Creativas de la Ciudad de Buenos Aires.

Quienes estén interesados en acceder a la propuesta de IncuBA lo que tiene que hacer es armar un proyecto para participar en un concurso. En este proyecto se les pide que incluyan un plan de negocios teniendo en cuenta los ejes que se evalúan en las distintas instancias de selección. En este sentido, podemos decir que se hace foco en tres patas fundamentales: una es la innovación del proyecto, la segunda tiene que ver con su viabilidad y la tercera tiene que ver con la entrega del equipo o del grupo en el cual se basa el proyecto. A su vez, desde la industria se observa de qué manera puede funcionar el proyecto y cómo viene desarrollándose.

¿Cuántos son los proyectos que funcionan a través de IncuBA?

Como te decía antes, empezamos a trabajar en el 2001 y ya hicimos seis concursos. De manera que en la actualidad tenemos 36 empresas incubadas. Entre ellas, 20 están dentro de este predio mientras las restantes ya tiene su lugar propio. A grandes rasgos, lo que nosotros brindamos desde IncuBA tiene que ver con el asesoramiento para la implementación de las distintas propuestas. Por ejemplo, compartimos las redes de contacto y buscamos vincularlos con los “mentores”, es decir, con personas que cuentan con experiencia en la industria para que los ayude a que las empresas se realicen.

¿Cuál es el tiempo de incubación para los proyectos?

Hasta el día de hoy, el tiempo es de tres años de incubación que se van renovando año por año, siempre que cumplan con el requisito de ir creciendo. A su vez, tenemos dos programas más. El primero es de “pre-incubación” a través del cual se ofrecen distintos talleres y cursos para que la gente pueda ir armando el plan de negocios, se fijen si es viable o no lo que proponen, etc. El segundo es de “post-incubación” y está dedicado a que quienes salen de la incubación estén en condiciones de producir sinergia con la industria.

A partir de ahora la idea es bajar de tres años a dos, o sea achicar el tiempo de incubación para poder ampliar la cantidad de proyectos a incubar. La idea desde el gobierno es armar un distrito de diseño que comprenda 10 cuadras a la redonda y que tenga al CMD como referente para continuar trabajando. Además estamos en plena construcción. La idea para el año que viene es terminar la obra y hacer 14 mil metros cuadrados para inaugurar la incubadora de empresas más grande de Latinoamérica.

¿Cuáles considerás que son las fortalezas de INCUBA?

En principio, una de las fortalezas son las “tutorías” que hacemos de los proyectos, digamos que vendrían a ser como médicos clínicos que siguen a cada uno de los proyectos cada quince días. Después contamos con las “asesorías” a cargo de los “especialistas” en economía financiera, marco legal, etc. Una característica de las asesorías es que funcionan a demanda, es decir, se dan cuando cada proyecto lo considera necesario. Además tenemos la figura de los “mentores” y los “facilitadores o docentes” que colaboran en los talleres y en toda la instancia de capacitación.

Digamos que hay dos formas de asesorarlos. Una es la inclusión a través del espacio físico, les damos oficinas a quienes así lo requieran y también están aquellos que no necesitan disponer del lugar porque ya tienen un local y sólo vienen a las asesorías.

Desde el año 2008 se agregaron otras áreas al CMD. Por ejemplo, tenemos opción libro, música y el OIC que es el Observatorio de Industrias Creativas. A partir de este año también se incluyó comercio exterior de la ciudad que al funcionar en este edificio hace que todas las industrias creativas desde lo nacional hasta lo internacional se estén nucleando.

¿Cuáles son los criterios de evaluación para los proyectos que se presentan?

Se valora la innovación. Nosotros la asociamos con el valor agregado. Por ejemplo, si tiene diseño, si tiene desarrollo social, qué lo distingue de lo que ya se está haciendo, cuál es su valor agregado. Además, observamos si captura valor en relación con la viabilidad, es decir, si es económicamente factible y pensamos si entrega valor y esto tiene que ver con el equipo, con la gente que trabajamos. Nosotros decimos que se puede tener una muy buena idea, incluso puede ser viable pero sino tenés la actitud de llevarlo adelante la idea no se concreta. El equipo que sostiene al proyecto por sí mismo para nosotros es importante.

¿Cuál puede ser la vinculación entre IncuBA y las escuelas medias de la Ciudad?

En principio nos interesa vincular al estudiante de la educación media que saliendo ya de su ámbito escolar quiera hacer proyectos innovadores. Ésta es una nueva idea que queremos trabajar, cómo podemos ayudar no sólo al estudiante universitario sino al estudiante secundario. Por ejemplo, pensamos que tal vez para darle viabilidad a los proyectos en las distintas escuelas a lo mejor sea necesario trabajar toda la parte de asociada con el funcionamiento de los negocios y ahí es donde nosotros los podemos ayudar para que hagan sus proyectos viables.

También creo que tiene que haber materias específicas dentro de los últimos años o en el último año, por ejemplo en las escuelas artísticas o técnicas, para que se armen proyectos con una mirada amplia. A lo mejor ven todo desde lo técnico y les falta toda la otra parte que implicaría explicarles el tema de los costos, la importancia del marketing, el diseño, es decir, toda la parte destinada a incentivarlos a que encaren el proyecto con las herramientas necesarias.